Comenzamos con las pilas bien puestas, luego de una semana de vacaciones, aunque de igual manera hubo gran actividad en el blog. Ya respondí los correos que me enviaron, así como también los comentarios que han hecho en los artículos del blog. Muchas gracias.
Nuestro protagonista hoy día es MusicBee, un excelente y completo programa gratuito para Windows, que tiene un parecido muy elocuente a iTunes, pero que desde luego trae unas que otras funcionalidades originales. Gestor, reproductor y conversor de ficheros de audio.
Como “gestor de música”, MusicBee te ofrece una completa biblioteca musical, en la cual puedes organizar tu música como quieras, disponiendo de grandes capacidades como la organización de las pistas, edición avanzada de etiquetas de tus ficheros MP3, entre otros.
Y por otro lado, las características del reproductor son muy amplias. MusicBee soporta los siguientes formatos de audio: MP3, OGG, WMA, AIFF, ALAC, APE, BWF, CDA, FLAC, M3U, MP4, PLS, TTA, WAV, TAK, SPX. Cuenta con una linda y elegante interfaz visual de usuario.
MusicBee cuenta también con un conversor de ficheros de audio incorporado, soportando los formatos de audio que anteriormente se nombraron. Además, cuenta con un ripeador de música. En definitiva es un software prometedor, aunque solamente está en inglés.
este blog esta dirigido a personas que le interese el genero armamentístico.Espero que les guste mucho y que queden complacidos con nuestro blog que intentaremos mejorar día a día con mucho esfuerzo.
viernes, 18 de marzo de 2011
Qué es un archivo y cómo funciona?
La Información de un ordenador está almacenada en lo que se llaman archivos. Normalmente los archivos están formados por un nombre, un punto y una extensión (p.e. PROGRAMA.EXE). El nombre nos sirve para diferenciar unos archivos de otros y la extensión para atribuirle unas propiedades concretas. Estas propiedades asociadas o "tipo de archivo" vienen dadas por las letras que conforman la extensión. Normalmente su máximo son tres letras aunque existen algunas excepciones (.jpeg, .html, .java, etc.). Cada uno de estos pequeños grupos de caracteres está asociado a un tipo de archivo.
Pongamos por ejemplo un archivo llamado "DOCUMENTO.TXT", su nombre será DOCUMENTO y su extensión TXT. Esta extensión esta asociada con el tipo de archivos que contienen texto, por lo tanto podemos suponer que habrá algo escrito dentro. Nuestro sistema operativo (Windows en este caso) tendrá una lista de los programas con los que puede ser utilizado este archivo y si deseamos visualizarlo éste será abierto con el NotePad o Bloc de Notas.
Sin embargo, probablemente nos ocurrirá el problema de que si exploramos un directorio o carpeta sólo veamos DOCUMENTO (sin el .TXT detrás). Se debe a que Windows oculta las extensiones de los archivos. Esto es algo peligroso por el hecho de que hay tipos de archivos que son potenciales contenedores de virus, y si no conocemos su extensión no lo sabremos. Para que Windows nos muestre las extensiones de todos los archivos iremos al Explorador de Windows y en el menú Herramientas accederemos a las opciones de carpeta. En la nueva ventana señalaremos la pestaña Ver y en la lista desmarcaremos la opción "Ocultar las extensiones de archivo para los tipos de archivo conocidos".
Ya que estamos en las opciones de carpeta, la siguiente pestaña "Tipos de Archivo" nos será muy útil. En ella se almacena la lista de diferentes extensiones que Windows reconoce y con que programa están asociadas. Desde ella podemos cambiar todas sus propiedades.
Marcando en la lista el tipo de archivo que nos interese y con el botón Cambiar podremos escoger que sea ejecutado por otro programa distinto. En las Opciones Avanzadas podremos seleccionar también el icono con el que aparezca y las acciones posibles.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)